Valerosas mujeres del Altiplano lideran el rescate de suelos con medidas ancestrales

Tras la sequía de 1983, cuando los hombres jóvenes tuvieron que migrar, las mujeres se quedaron a cargo de todo: ganado, niños y ancianos, y ya no hubo quien se haga cargo de las milenarias obras de control y mitigación, construidas con precisión para contener posibles riadas e inundaciones que es lo que ha estado afectando a esos municipios.

Con la implementación de la iniciativa piloto “Medidas ancestrales para el control de la sedimentación en fuente”, que ejecuta la Unidad de Gestión de la Cuenca Katari con el respaldo de PNUD, las comunidades se han capacitado, se han organizado, han conformado Organismos de Gestión de Cuenca y, con la mayoritaria mano de obra femenina, han desarrollado la iniciativa en algunas regiones.

A las comunidades establecidas por el proyecto, se han sumado más comunidades y ahora demandan la búsqueda de la sostenibilidad del proyecto, porque el piloto ha funcionado.

Mujeres de trabajo pesado y visión distinta

Durante la última visita al lugar, el pasado 16 de diciembre de 2021, las autoridades de la gobernación y del municipio de Santiago de Machaca, junto a representantes del concejo municipal, autoridades originarias, el alcalde René Mixto y la subgobernadora de la provincia José Manuel Pando, Lorgia Cantuta y miembros del directorio del Organismo de Gestión de Cuencas de la microcuenca del Jach’a Mauri, destacaron el trabajo pesado que hacen las mujeres de las comunidades levantando y moviendo piedras y otros materiales para mitigar el arrastre de sedimentos.

Fernando Arevillca, coordinador de la organización Soluciones Prácticas, implementadora del piloto, destacó el trabajo mancomunado que hacen las comunidades con el proyecto y la participación de las mujeres, “la mujer no mide esfuerzo tiene que trabajar a nivel del hombre”.

Relató que cuando se implementaron talleres participativos en ambos municipios para informar sobre el proyecto, y realizar un diagnóstico social, se vio que la mayoría de la población está por encima de los 50 años y que en ese contexto la visión de la mujer es distinta.

“Y, gracias a la capacitación, varias mujeres, además de ser dirigentes, han sido nombradas como representes del Organismo de Gestión de Cuenca”, además que son muy activas compartiendo conocimiento, en ferias comunitarias y unidades educativas.

También destacó el empoderamiento de personas de la tercera edad que han participado activamente en los intercambios de experiencias. “Pese a la edad hay todavía las ganas de ir aprendiendo, ellos son agentes de cambio”.